martes, 17 de febrero de 2009

Santo Grial

La Primera Impresión

El Santo Cáliz de Valencia suscita a la vez las sensaciones de admiración y escepticismo. El visitante se siente primero cautivado por la belleza del Grial, su forma perfecta y extraña, los detalles de oro y las perlas y piedras preciosas; viene también el observador con la mente llena de leyendas, películas e incluso prevenido por las novelas y la literatura pseudocientífica de temas “griálicos”.

Pero también con escepticismo:
Se transcriben como li-izahirati o lilzáhira, para el que reluce">

¿Cómo puede ser ese cáliz de apariencia medieval la copa de la última Cena? ¿Por qué en Valencia? ¿No será acaso uno de tantos presuntos Griales? ¿Por qué no es tan famoso como la Sábana Santa de Turín o la Túnica de Treveris? Y así tantas preguntas como escuchamos cada día en la Catedral.

No debe engañarnos la apariencia.
En realidad, la reliquia es la parte superior, que es una taza de ágata finamente pulida, que muestra vetas de colores cálidos cuando refracta la luz; es una preciosa “copa alejandrina” que los arqueólogos consideran de origen oriental y de los años 100 al 50 antes de Cristo. Ésta es la conclusión del estudio efectuado por el profesor D. Antonio Beltrán y publicado en 1960 (“El Santo Cáliz de la Catedral de Valencia”), nunca refutado, y que está en la base del creciente respeto y conocimiento del Santo Cáliz.

17 cm. de altura, 9 cm. de anchura de la copa y 14,5 x 9,7 cm.">

Mucho más posteriores son las asas y el pie de oro finamente grabado, que encierra una copa o “naveta” de alabastro, de arte islámico, diferente a la copa; todo ello, lo mismo que las joyas que adornan la base son de época medieval. Las dimensiones son modestas: 17 cm. de altura, 9 cm. de anchura de la copa y 14,5 x 9,7 cm. que tiene la base elíptica.

pulse aquí para ampliar la imagenVenecia y otros lugares conservan cálices de piedras semi preciosas de origen bizantino y en España hay ejemplares similares de los siglos XI y XII, pero se trata de vasos litúrgicos, engarzados en oro y plata y cubiertos de metal en su interior. Sin embargo, al componer el cáliz de Valencia, los orfebres destacaron la copa, desnuda de adornos, con grandes asas para llevarla sin tocar el preciado y delicado vaso de piedra traslúcida.

La Tradición de los Primeros Siglos

La tradición nos dice que es la misma Copa que utilizó el Señor en la última Cena para la institución de la Eucaristía, que luego fue llevado a Roma por San Pedro y que conservaron los Papas sucesores a éste hasta San Sixto II, en que por mediación de su diácono San Lorenzo, oriundo de España, fue enviado a su tierra natal de Huesca en el siglo III para librarlo de la persecución del emperador Valeriano. Recomienda esta permanencia del Santo Cáliz en Roma la frase del Canon Romano mencionada antes: “Tomo este Cáliz glorioso”, hoc praeclarum calicem; expresión admirativa que no encontramos en otras anáforas antiguas, y no podemos olvidar que la plegaria eucarística romana es la versión latina de otra en lengua griega, pues ésta fue la propia de la Iglesia de Roma hasta el Papa San Dámaso en el siglo V.

La Historia del Santo Cáliz en España

pulse aquí para ampliar la imagenDurante la invasión musulmana, a partir del año 713, fue ocultado en la región del Pirineo, pasando por Yebra, Siresa, Santa María de Sasabe (hoy San Adrían), Bailio y, finalmente, en el monasterio de san Juan de la Peña (Huesca), donde puede referirse a él un documento del año 1071 que menciona un precioso cáliz de piedra.

pulse aquí para ampliar la imagenLa reliquia fue entregada en el año 1399 al Rey de Aragón, Martín el Humano que lo tuvo en el palacio real de la Alfajería de Zaragoza y luego, hasta su muerte, en el Real de Barcelona en 1410, mencionándose el Santo Cáliz en el inventario de sus bienes (Manuscrito 136 de Martín el Humano. Archivo de la Corona de Aragón. Barcelona, donde se describe la historia del sagrado vaso) Hacia 1424, el segundo sucesor de Don Martín, el Rey Alfonso V el Magnánimo llevó el relicario real al palacio de Valencia, y con motivo de la estancia de este Rey en Nápoles, fue entregado con las demás regias reliquias a la Catedral de Valencia en el año 1437 (Volumen 3.532, fol. 36 v. Del Archivo de la Catedral).

El Santo Cáliz en Valencia

pulse aquí para ampliar la imagenFue conservado y venerado durante siglos entre las reliquias de la Catedral, y hasta el siglo XVIII se utilizó para contener la forma consagrada en el “monumento” del Jueves Santo. Durante la guerra de la Independencia, entre 1809 y 1813, fue llevado por Alicante e Ibiza hasta Palma de Mallorca, huyendo de la rapacidad de los invasores napoleónicos. En el año 1916 fue finalmente instalado en la antigua Sala Capitular, habilitada como Capilla del Santo Cáliz. Precisamente esta exposición pública permanente de la sagrada reliquia hizo posible que se divulgara su conocimiento, muy reducido mientras permaneció reservado en el relicario de la catedral.

pulse aquí para ampliar la imagenDurante la guerra civil (1936-1939) permaneció oculto en el pueblo de Carlet. El Beato Juan XXIII concedió indulgencia plenaria en el día de su fiesta anual, el Papa Juan Pablo II celebró la Eucaristía con el Santo Cáliz durante su visita a Valencia el 8 de noviembre de 1982 y lo mismo sucedió con Su Santidad Benedicto XVI que celebró la Eucaristía con motivo del V Encuentro Mundial de las Familias, el 8 de Julio de 2006.

¿Es auténtico?

pulse aquí para ampliar la imagenYa hemos dicho que la crítica negativa nos dice que ya en tiempos de Jesús era una valiosa antigüedad y hay una costumbre israelita que nos da un dato positivo importante; en efecto, todavía en la actualidad cada familia judía conserva con cariño la “copa de bendición” para las cenas pascual y sabáticas. Los evangelios nos dicen que Jesús celebró el rito pascual en una sala decorosa, amueblada con divanes (Mc 14, 15) ¿Extrañaría que la familia que lo acogió no pusiese ante el Señor la preciosa copa familiar para que pronunciase las bendiciones rituales, la última de las cuales se transformó en la primera consagración eucarística del vino en la Sangre del Redentor? Hemos visto demasiadas escenas “pobres” de la última Cena, con los discípulos sentados en el suelo y Jesús tomando en sus manos un humilde vaso de barro... pero no fue así.

Así pues, los Apóstoles y los primeros cristianos pudieron identificar el vaso de la primera Eucaristía y conservarlo a pesar de su fragilidad ¿Cómo pudo conservarse intacto los primeros y azarosos mil años si no es porque lo protegía la memoria de un misterio sacratísimo?

Las Leyendas del Grial

El tema de la búsqueda del Grial, objeto maravilloso y fuente de vida, es fundamental en la literatura medieval franco-germánica, y su origen está sobre todo en las obras de Chretien de Troyes, que dejó inacabada hacia 1190 su obra Perceval o el Cuento del Graal; aquí no se explica cuál es la naturaleza de esta joya, y fue Wolfram von Eschenbach quien le dio forma de cáliz en su poema “Perceval el Galés”. Se cree que concibió su Parsifal a principios del siglo XIII, en el Wartburg, mítico castillo, cuna de poetas y trovadores; y que lo finalizó en 1215. Allí, en este castillo, donde estos cantores al Amor, estos Maestros Cantores, cuyas tres reglas principales, Dios, su señor y la mujer amada, constituían la fuente de sus inspiraciones, compuso Wolfram su magna obra. Pues él fue el príncipe de los trovadores, la máxima figura junto a Walter von der Vogelweide y Heinrich Tannhäuser.

Recientes investigadores, como Michael Hesemann (“Die Entdeckung des Heiligen Grals. Das Ende einer Suche”, Ed. Pattloch 2003), sitúan el origen de estas leyendas en España y sobre la base del Cáliz de ágata de San Juan de la Peña, y no podemos olvidar que fueron la fuente de inspiración para las grandes obras poético-musicales de Richard Wagner “Tannhäuser”, “Parsifal” y “Lohengrin”.

Un tema de actualidad

Pero si bien la literatura griálica medieval encontró en la búsqueda del sagrado vaso un símbolo de purificación y de renuncia para llegar a la perfección personal y a la salvación, asistimos desde hace años a la aparición novelas fingidamente históricas y a toda una literatura esotérica que hace del Grial un oscuro objeto o una tradición ocultada a través de los siglos que conservaría la auténtica esencia del cristianismo o la verdadera historia de Jesús de Nazaret. Parece que lo que no consiguió la crítica liberal y el materialismo anti-religioso, se pretendiera ahora lograr con esta pseudo divulgación para destruir la limpia fe de la Iglesia en Jesucristo el Señor. De este modo, la sospecha y la falsedad buscan empañar lo que fue y debería seguir siendo un icono de la cultura cristiana.

pulse aquí para ampliar la imagenPor ello, el Cáliz, con su autenticidad arqueológica y su tradición exenta de elementos maravillosos, nos remite a la época de Jesús y nos recuerda la institución de la Eucaristía como momentos históricos que transcienden el tiempo y llegan hasta nosotros como misterio de salvación. Así lo vivimos cuando la sagrada reliquia se traslada desde su preciosa capilla, la antigua sala capitular (siglo XIV), hasta el altar mayor en la celebración de la Santa Misa en la Cena del Señor, el Jueves Santo y en la fiesta solemne del último jueves del mes de octubre.

Este es el mensaje que se desea proclamar desde la Catedral de Valencia, con el apoyo de beneméritas asociaciones como la Real Hermandad y la Cofradía del Santo Cáliz que, junto con el Cabildo Metropolitano, mantienen el culto y la difusión de la devoción del Santo Cáliz, que se expresa en las peregrinaciones de parroquias y entidades religiosas y cívicas, todos las semanas, en la celebración de los “jueves del Santo Cáliz”.

lunes, 9 de febrero de 2009

Escudo de Calabuig


Calabuig

Calabuig, Calabús, Carabús, Carabuch, Carapuig, Clarabuc.

Catalán. Apellido de origen catalán, con casas solares en Pujol de Planes (Barcelona), su dueño Jaume Calabuig, documentada en la Fogueración catalana de 1553; en el Ampurdán y en Castelló de Ampurias (Girona), documentada esta última en 1530. Pasaron a Estados Unidos y Uruguay

Procede del nombre de bautismo catalán Calabuig, derivado del nombre personal latino de origen griego Calepodius, que fue el de un santo del siglo III. Este antiguo nombre, que viene a significar en griego "(el de los) pies bonitos", estuvo bastante extendido en Cataluña durante la Alta Edad Media y también ha dejado huellas en la toponimia pues existe una localidad gerundense llamada Calabuig que quizás tenga relación con este linaje..

El antiguo castillo de Calabuig, del condado de Empúries, fue adquirido el 1175, por los vizcondes de Rocabertí al monasterio de Banyoles, que había fundado años antes el priorato de Calabuig (Sant Nicolau y Santa Creu de Calabuig) en la iglesia parroquial de Sant Nicolau (actualmente en ruinas), situada a un km. del castillo. El castillo fue destruido el 1275 por orden de Jaime I de Aragón durante la expedición de castigo contra el condado de Ampurias. El priorato perduró hasta 1618; los últimos priores eran solamente titulares, y residían en Banyoles.

Beranguer Calabuig, del Ampurdán, fue vecino de Bocairent (Valencia) en 1359. Johan Calabuig, del Alto Ampurdán, era vecino de Bocairent (Valencia) en 1421. José Calabuig y Bellot fue Alcalde Mayor de Enguera (Valencia) en 1834.

Fray Tomás Calabuig Carsi Casani y Ubeda, natural de Valencia, Ministro del Convento de Trinitarios calzados de San Felipe de Xàtiva (València), probó su limpieza de sangre para ejercer el cargo de Calificador ante el Santo Oficio de la Inquisición de Valencia en 1758.

Entre los caballeros que aparecen en el Archivo General Militar de Segovia citamos: Antonio Calabuig. Cab., 1823; Alfonso Calabuig Curuana. Art, 1913; Ignacio Calabuig Ferrez. Cadete, 1848; Olallo Calabuig Morales. Ing., 1878; Antonio Calabuig Plá. Art., 1914.

Vicent Calabuig y Parra (Bocairent 1852- Valencia 1915). Jurista y político. Fue catedrático de derecho romano y de derecho civil en la Universidad de Valencia. Fue diputado por los distritos de Alzira, Gandia y Valencia en diferentes ocasiones. También fue senador por la provincia y por la Universidad de Valencia.

Armas: En campo de sinople, un sol figurado, de oro.

Armas: Los de Cataluña, radicados en Madrid y pasados a Indias, traen: En campo de gules, cuatro palos, de oro.

lunes, 2 de febrero de 2009

Los almohades


Aparecen los Almohades Al mismo tiempo que los almorávides eran derrotados en al-Ándalus por los guerreros cristianos, su imperio africano desaparecía. Un nuevo imperio, el Almohade aparecía y los derrotaba en África.
Los Almohades fueron un imperio berébere norteafricano que dominó la España musulmana en las últimas décadas del siglo XII y la primera mitad del siglo XIII. Los almohades surgieron como un movimiento religioso reformista que aglutinó a diversas tribus montañesas del Atlas (África del norte). Su dirigente, Ibn Tudmar (c. 1089-1128), se opuso a los almorávides. Sus seguidores recibieron el nombre de al-muwahhidun, 'los partidarios de la unicidad', de dónde salió el nombre dado a este imperio.
Los almohades llegan a la Península IbéricaAl tiempo que extendían su imperio por las tierras del Magreb (norte de África), los almohades llevaron a cabo la conquista de al-Ándalus, que se había fragmentado de nuevo en reinos de taifas ante la desaparición del poder almorávide.
El dominio de la Península se inició en 1147 con la ocupación de Sevilla, pero no terminó hasta 1172. En esta fecha, el segundo califa almohade Yusuf I (1163-1184) conquistó el reino de Valencia y Murcia. Sevilla se convirtió en la capital andalusí del Imperio Almohade.
Lograda la unificación de al-Ándalus, los almohades aumentaron su ataque contra los reinos cristianos. El gran ataque se produjo en 1195. El califa Yusuf II (1184-1199) aplastó al ejército castellano dirigido por Alfonso VIII en la batalla de Alarcos. La gravedad de la situación obligó a los reyes cristianos a relegar sus diferencias internas para hacer un frente común contra los almohades.
En el año 1212 las tropas cristianas destrozaron al ejército almohade en la batalla de las Navas de Tolosa. Con esta derrota el poder de los almohades en la Península quedó prácticamente aniquilado.
Breve resurgir de al-ÁndalusEl régimen almohade fue ante todo una dictadura militar. Sus dirigentes, que ejercían un poder absoluto, ostentaron el título de califas, pero no contaron en ningún momento con el apoyo popular. Pese a todo, durante la dominación almohade al-Ándalus vivió una época de indudable progreso desde el punto de vista económico.
La cultura y las artes tomaron un nuevo impulso. Los estudios filosóficos resurgieron en al-Ándalus de la mano de Averroes y de Abentofail. Sin embargo, de nuevo, como durante el rígido imperio almorávide, mozárabes y judíos fueron perseguidos y muchos tuvieron que salir de al-Ándalus, como el filósofo hispanojudío Maimónides, que emigró a África. Se produjo una fuerte expansión de los regadíos. Las obras más conocidas del arte almohade se encuentran en la ciudad de Sevilla: la Giralda, la Torre del Oro, y las murallas de la ciudad.

Fotos

Esta placa representa a Jaime I cuando derrotó a los moriscos.